Aunque en los medios de comunicación siguen sin tener un gran impacto, son ya unos cuantos años que se llevan celebrando los premios L'Oréal-UNESCO For Women in Science. Con estos premios se busca celebrar y mostrar la tenacidad, creatividad e inteligencia de 5 mujeres científicas de todo el mundo. Estos premios quieren mostrar no solo que la Ciencia es una actividad de mujeres, también quieren mostrar que la Ciencia no solo es cosa de las grandes potencias como Estados Unidos o Europa. Por ello, los premios se reparten en 5 grandes zonas de influencia. Este año, destaca de manera especial, como los premios se han dirigido hacia investigaciones que buscan dar respuesta a enfermedades que afectan a nuestras sociedad. En definitiva, el trabajo de estas investigadoras busca ofrecer al mundo unas mejores condiciones de vida.
En la zona de África y países árabes, la premiada ha sido la profesora Quarraisha Abdool Karim de la facultad de Medicina Nelson R. Mandela (KwaZulu-Natal, Sudáfrica). Con este premio se quiere destacar las aportaciones de esta investigadora para controlar la propagación del virus VIH. No conviene olvidar que, aunque el virus de VIH es mucho más conocido y está más controlado con los avances científicos, 36,9 millones de personas están infectadas con el VIH en todo el mundo.
En la zona de Asia y el Pacífico, la premiada ha sido la profesora Hualan Chen del Instituto de Investigación Veterinaria Harbin, Academia China de Ciencias Agrícolas (Harbin, China). Con este premio se quiere destacar las aportaciones de la esta investigadora para proteger vidas contra virus de gripes mortales a través de vacunas innovadoras. En los últimos años, hemos podido conocer como mutaciones más violentas del virus de la gripe se han convertido en verdaderos problemas de salud para el mundo
En la zona de América Latina, la premiada ha sido la profesora Andrea Gamarnik del Laboratorio de Virología Molecular, Fundación Instituto Leloir (Buenos Aires, Argentina). Con este premio se quiere destacar la lucha de esta investigadora por limitar la propagación del virus del dengue. Aunque parezca mentira, para nuestros ojos occidentales, cada año 390 millones de personas se infectan con este virus.
En la zona de Europa, la premiada ha sido la profesora Emmanuelle Charpentier del Instituto Max Planck de Biología de Infecciones (Berlín, Alemania). La tecnología de edición del genoma desarrollado por la profesora Carpentier tiene la capacidad de “reescribir” el ADN. Esto es clave para seguir buscando la cura para las más de 10.000 enfermedades incurables causadas por defectos genéticos individuales.
Por último, en la zona de América del Norte, la premiada ha sido la profesora Jennifer Doudna del Instituto Médico Howard Hughes, Departamento de Biología Molecular y Celular de la Universidad de California (Berkeley, Estados Unidos). Su trabajo, junto con Emmanuelle Charpienter, será clave en los próximos años para desarrollar un campo de investigación impensable hace una década.