El 15 de diciembre de 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 11 de febrero de cada año como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Por lo tanto, hoy estamos de celebración. La pregunta es clara, ¿por qué necesitamos este día?... Para responderla podemos plantearnos otras y de paso comprobar como está nuestra cultura científica en femenino:
1. ¿Cuántas mujeres aparecen en los libros de texto de Ciencias de nuestras aulas?...
2. ¿Cuántos años hace que no se otorga el Nobel de Física a una mujer?...
3. ¿Cómo Tim Hunt, laureado con el Nobel de Medicina, puede abogar en pleno siglo XXI por laboratorios segregados por sexo?...
4. Conoces a Lavoisier pero, ¿quién fue Marie-Anne Pierrette Paule?...
5. ¿Quién es la actual directora del CERN?...
6. ¿Quién ha recibido dos premios Nobel de la Paz como parte del equipo directivo de dos importantes instituciones?...
7. ¿Cuántas mujeres han recibido la medalla Fields desde la creación del premio hace 80 años?...
8. ¿Será solo cuestión de tiempo que las cosas cambien?...
Al leer el último informe de la Comisión Europea sobre Ciencia y Género, She Figures 2015, los datos son claros. Este informe indica que de forma progresiva, las europeas están sobresaliendo en la educación superior, y, a pesar de ello, representan sólo un tercio del personal de investigación y alrededor de una quinta parte del personal académico de nivel superior. Por otro lado, el número de mujeres a la cabeza de las instituciones de educación superior aumentó de 15,5 % en 2010 al 20% en 2014, pero está claro que queda un largo camino por recorrer antes de alcanzar la igualdad de género en las profesiones de investigación e innovación europea. Parece lógico pensar que estas conclusiones son extensibles al resto del planeta.
Al buscar las razones de esta diferenciación, siempre se ha esgrimido la necesidad de tiempo para alcanzar la igualdad. Sin embargo, diferentes estudios han puesto de manifiesto la existencia de un sesgo, inconsciente o no, en la valoración de la capacidad investigadora de las mujeres frente a los hombres que nos hace considerar a los primeros mejor dotados para la investigación. Lo curioso de estos estudios es que indican claramente que este sesgo en la valoración no es exclusivo de los hombres sino que en las mujeres también está presente. Informes como Blind Ambition, centrado en el premio Nobel de Física, lo puso de manifiesto en 2013. Por lo tanto, no solo es cuestión de tiempo. Es cuestión de cambiar la mentalidad de una sociedad que es sexista a un nivel mucho más profundo de lo que se pensaba.
6. ¿Quién ha recibido dos premios Nobel de la Paz como parte del equipo directivo de dos importantes instituciones?...
7. ¿Cuántas mujeres han recibido la medalla Fields desde la creación del premio hace 80 años?...
8. ¿Será solo cuestión de tiempo que las cosas cambien?...
Al leer el último informe de la Comisión Europea sobre Ciencia y Género, She Figures 2015, los datos son claros. Este informe indica que de forma progresiva, las europeas están sobresaliendo en la educación superior, y, a pesar de ello, representan sólo un tercio del personal de investigación y alrededor de una quinta parte del personal académico de nivel superior. Por otro lado, el número de mujeres a la cabeza de las instituciones de educación superior aumentó de 15,5 % en 2010 al 20% en 2014, pero está claro que queda un largo camino por recorrer antes de alcanzar la igualdad de género en las profesiones de investigación e innovación europea. Parece lógico pensar que estas conclusiones son extensibles al resto del planeta.
Al buscar las razones de esta diferenciación, siempre se ha esgrimido la necesidad de tiempo para alcanzar la igualdad. Sin embargo, diferentes estudios han puesto de manifiesto la existencia de un sesgo, inconsciente o no, en la valoración de la capacidad investigadora de las mujeres frente a los hombres que nos hace considerar a los primeros mejor dotados para la investigación. Lo curioso de estos estudios es que indican claramente que este sesgo en la valoración no es exclusivo de los hombres sino que en las mujeres también está presente. Informes como Blind Ambition, centrado en el premio Nobel de Física, lo puso de manifiesto en 2013. Por lo tanto, no solo es cuestión de tiempo. Es cuestión de cambiar la mentalidad de una sociedad que es sexista a un nivel mucho más profundo de lo que se pensaba.
Este día es un día de celebración y queremos aportar nuestro pequeño granito de arena. Como se suele decir, Para muestra un botón... y aquí traemos dos botones de la inmensa muestra que son las mujeres que trabajan en el campo de la investigación: Alicia Magdalena Sintes y María Regí.
Uno de los grandes hallazgos de este último año ha sido la detección de las ondas gravitaciones. En este gran descubrimiento ha participado un equipo de investigadores de la Universidad de la Islas Baleares liderado por Alicia Magdalena Sintes Olives.
Alicia Magdalena Sintes Olives es profesora titular de la
Universidad de las Islas Baleares en el área de Física Teórica. Doctora en
Física por la UIB, ha realizado estancias postdoctorales, primero con una beca Marie
Curie y posteriormente como investigadora senior en el Instituto
Max Planck für Gravitationsphysik de Alemania, así como otras estancias
más cortas en países como Canadá, Reino Unido o Austria.
Su
investigación se centra en el campo de la astronomía de ondas
gravitacionales. La doctora Alicia Sintes tiene una
larga trayectoria de participación en grandes colaboraciones internacionales
como LIGO, GEO (principales detectores de ondas gravitacionales) y también está
involucrada en la misión espacial eLISA y en el diseño de futuros detectores
como Einstein Telescope.
Por
otro lado, Alicia Sintes ha sido asesora científica de la Agencia
Espacial Europea: como miembro del ESA's Fundamental Physics Advisory
Group y como miembro del Fundamental Physics Roadmap Advisory Team. A su vez
fue miembro del grupo G8 de la Red de infraestructuras de Astronomía y miembro
de la Red de Interlocutores Universitarios para el 7º Programa Marco, grupo de
Seguridad y Espacio, del Servicio Europa I+D de la CRUE.
Por último, pero no por ello menos importante, en este día de celebración, queremos enviar nuestra más sincera felicitación a una de nuestras investigadoras más importantes tanto a nivel nacional como internacional. En enero de 2017 nos enteramos que María Vallet-Regí, catedrática de Química Inorgánica de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, había sido elegida Fellow del American Institute for Medical and Biological Engineering (AIMBE). Para pertenecer al AIMBE es necesario que las personas propuestas sean nominadas cada año por sus compañeros y que éstos representen el 2% de la comunidad médica y biológica. Es decir, el ser elegido como miembro del AIMBE es un honor que está al alcance de muy pocos investigadores. ¿Oíste esta noticia en la radio?... ¿La viste en la televisión?... Si ya la Ciencia ocupa un espacio reducido en los medios de comunicación, si encima es Ciencia en Femenino la cosa empeora por momentos.
Si quieres tener más información sobre este día, y en general, sobre aspectos relacionados con la igualdad de género en Ciencia, pincha en el siguiente enlace: 11 de febrero.
Por cierto, las respuestas a las preguntas planteadas al principio son:
1. Muy, muy pocas. Marie Curie, y con suerte, Rosalind Franklin o Lise Meitner.
2. Más de 50 años.
3. Inconcebible para mí...
4. La esposa de Lavoisier y co-responsable del descubrimiento de la ley de la conservación de la masa.
5. Fabiola Gianotti, desde enero de 2016.
6. Ana María Cetto Kramis. Física mexicana, era presidenta del Consejo de las Conferencias Pugwash cuando recibieron el premio Nobel de la Paz en 1993. Además, era miembro de la dirección del Organismo Internacional de la Energía Atómica cuando recibió el premio Nobel de la Paz en 2003.
7. Premio que reconoce la excelencia en el campo de la matemática, cuenta con una única galardonada: Maryam Mizarkhani en 2014.
8. No es el factor determinante. Modificar los patrones de pensamiento con respecto a la capacidad investigadora de las mujeres se ha convertido en el factor principal.
Más información sobre Género y Ciencia:
Si quieres tener más información sobre este día, y en general, sobre aspectos relacionados con la igualdad de género en Ciencia, pincha en el siguiente enlace: 11 de febrero.
Por cierto, las respuestas a las preguntas planteadas al principio son:
1. Muy, muy pocas. Marie Curie, y con suerte, Rosalind Franklin o Lise Meitner.
2. Más de 50 años.
3. Inconcebible para mí...
4. La esposa de Lavoisier y co-responsable del descubrimiento de la ley de la conservación de la masa.
5. Fabiola Gianotti, desde enero de 2016.
6. Ana María Cetto Kramis. Física mexicana, era presidenta del Consejo de las Conferencias Pugwash cuando recibieron el premio Nobel de la Paz en 1993. Además, era miembro de la dirección del Organismo Internacional de la Energía Atómica cuando recibió el premio Nobel de la Paz en 2003.
7. Premio que reconoce la excelencia en el campo de la matemática, cuenta con una única galardonada: Maryam Mizarkhani en 2014.
8. No es el factor determinante. Modificar los patrones de pensamiento con respecto a la capacidad investigadora de las mujeres se ha convertido en el factor principal.
Más información sobre Género y Ciencia:
Matemáticas y Género: Enlace
Informe Blind Ambition: Enlace
She Figures 2015: Enlace